viernes, 31 de mayo de 2024

La verdad y el conocimiento en tiempos del algoritmo y la inteligencia artifical

 

Ricardo Ojeda Leos

     La búsqueda de la verdad nunca fue tan fácil, esto es, prácticamente se puede acceder a ella a través de unos cuantos clics gracias a la gran explosión de posibilidades tecnológicas, pero paradójicamente al mismo tiempo, jamás fue tan difícil dar con ella, debido a la desorbitada proliferación de falsedades o de sesgos ideológicos, políticos, comerciales y de intereses de diversa índole. El contenido digital tanto a nivel individual como institucional está repleto de estos sesgos ya sea de manera consciente o inconsciente. Esto no quiere decir que en antaño no existieran sesgos y distintas visiones de la realidad, la diferencia radica, además de la inconmensurable cantidad y posibilidades de acceso, en la ligereza y facilidad con la que se altera la realidad a través del universo de la digitalización. El advenimiento de la denominada IA, es decir, la inteligencia artificial, coloca este ámbito de la alteración digital de la realidad en un túnel sin precedentes ni final.

     Quizá si no fuera por la influencia y el impacto que pueden y, de hecho, ya ejercen dentro de los rumbos y decisiones políticas que eligen las sociedades democráticas en el mundo, el desarrollo del fenómeno digital no debería asustarnos al contemplar el universo de posibilidades que se abren en un gran número de campos del conocimiento y del desarrollo tecnológico. Pero, sin embargo, con la contribución del famoso “algoritmo” que se desarrolla cada vez más y se expande dentro de la navegación en la web, el individuo en cada búsqueda que realiza e incluso en cada hojeada digital del móvil, que se estima en promedio en unas 150 veces al día[1], esto es, más de 4 mil ocasiones durante un mes, queda a merced de una extensa cantidad de contenido digital en forma de anuncios y notas periodísticas y pseudo periodísticas, casi imposibles de distinguir unas de las otras si no se cuenta con una  sólida formación crítica. Se trata de una lucha muy desigual del pensamiento crítico contra más de 300 mil exposiciones digitales a la que es sometido un individuo durante 6 años.

     La población mexicana de más de 15 años tiene en promedio una escolaridad de 9.7 grados[2] que equivale apenas a un poco más de la secundaria concluida, es decir, este perfil de la sociedad está permanentemente expuesto de forma significativa a esta manipulación digital, de manera quizá inconsciente, pero también es verdad que otros sectores sociales con mayor grado de escolaridad, lo pueden estar de manera consciente, al evitar explorar otras aproximaciones y decidir quedarse en ese efluvio digital que el “algoritmo” y la IA les proporciona.

     Está claro que nadie, absolutamente nadie, ni el más avezado ni el más ignorante, por naturaleza humana, admitirá que es víctima de esa manipulación digital, porque exactamente cada contenido que le es proporcionado refuerza esa visión o sesgo que él percibe como la única verdad y a fuerza de la constante exposición de ese material a modo, llega a hacer como propio todas las visiones y conclusiones que le son introyectadas y el resultado es un individuo que se percibe a sí mismo como un ente original y poseedor de la verdad con suficiente dosis de altanería como para calificar de manipulados e ignorantes a los demás. Como decía Descartes: "No hay nada repartido más equitativamente en el mundo que la razón: todo el mundo está convencido de tener suficiente".

La alternativa ante el círculo vicioso de la manipulación incesante en la era digital y la consecuente búsqueda de la verdad y el conocimiento, lo es, como ya se esbozó, una formación crítica que permita la comparación de otras ideas, así como la consulta de sitios serios de información y con visiones distintas. La exploración de las fuentes originales para contrastar posibles contenidos editados y descontextualizados que pululan estratégicamente en la web a favor de los más siniestros intereses debe ser también una práctica consuetudinaria.

7 comentarios:

  1. Muy interesante y oportuno este documento, para reflexionar y modificar actitudes perniciosas que sin analizar llevamos a cabo. Felicidades.

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  2. Como siempre excelente reflexión

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  3. Un análisis breve pero conciso, gracias por tu aportación!

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  4. Hola👋 no sé cuántas veces reviso el celular y la escolaridad, estoy segura que se más que los jóvenes que está ahorita en la prepa

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  5. Es muy valioso tu comentario ojalá pudiera hacernos reflexionar y actuar.

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